2 ene 2014

(C)



                … El límite tiende a cero, la ecuación obliga al existente a evacuar los contenidos simbólicos desamparándose a conciencia en pos de un ideal. El vacío que poco a poco se apodera de las sensaciones nos recompensa con una ansiedad desenfrenada, dominadora de cuanto se concibe.

...obviamente la evasión se torna un imperativo para satisfacer la tendencia a esa nulidad que promete el infinito.